Cómo elegir el bordillo de hormigón adecuado según el tipo de vía y tránsito

Elegir el bordillo de hormigón adecuado para el tipo de vía y tránsito es fundamental en proyectos de infraestructura vial. Esta elección depende de diversos factores. Entre ellos, destacan las características de la vía, el tipo de tránsito habitual y su volumen, la velocidad permitida, la ubicación, etc. Pero además, hay que tener en cuenta otros factores como la climatología, la normativa vigente o la estética del entorno.

En este artículo vamos a detallar los aspectos clave que debemos tener en cuenta al seleccionar el bordillo más apropiado para nuestro proyecto, según todas estas variables.

bordillos-de-hormigon

Tipología y  función de los bordillos de hormigón

La función principal de un bordillo es la de separar la calzada de las aceras, áreas verdes u otras zonas peatonales, delimitando y protegiendo las diferentes zonas de circulación y garantizando la seguridad de peatones y vehículos.

Otras funciones  de los bordillos de hormigón son el confinamiento lateral de los firmes y pavimentos para protegerlos de la degradación por los bordes, la materialización de cambios de nivel (calzada-acera por ejemplo) o la delimitación de áreas funcionalmente distintas en una calle: aparcamiento de calzada, carril bici, etc.

Dependiendo de su ubicación y función, los bordillos de hormigón pueden clasificarse en:

  • Bordillos de calzada. Están diseñados para tareas pesadas, tráfico rodado, zonas de aparcamiento y carreteras. Se fabrican con hormigones de alta resistencia.
  • Bordillos peatonales. Complementarios a los anteriores, están concebidos para zonas de paso humano. Están fabricados con hormigón de alta calidad y se ofrecen en distintos colores y formas.
  • Bordillos de rotonda. Forman parte de los bordillos de calzada y también se les conoce como bordillos montables. Se fabrican con hormigón de alta resistencia y se utilizan en glorietas, medianas e isletas.
  • Bordillos de jardín o bordillos decorativos. Se utilizan para delimitar zonas ajardinadas y paseos, para la construcción de parterres y jardineras o para el remate de muros.
  • Piezas especiales: de vado que ayudan a salvar desniveles, rigolas para ayudar a canalizar el agua, etc.

Tipos de vías y tránsito y su influencia en la elección del bordillo

El tipo de vía y el tipo de tránsito que por ella circula es un factor determinante a la hora de escoger el bordillo más adecuado para un proyecto. A continuación, vamos a analizar las principales categorías de vías, su tráfico y qué tipo de bordillo se recomienda en cada caso:

  • Vías urbanas principales. Este tipo de vía soporta un alto volumen de tráfico, que puede incluir vehículos pesados como autobuses y camiones. Se recomienda utilizar bordillos de hormigón de alta resistencia, como los bordillos de calzada.
  • Calles residenciales. En áreas con menor tránsito y predominio de vehículos ligeros, es posible emplear bordillos de menor tamaño y resistencia como los bordillos peatonales. Además, en estas zonas, la estética cobra mayor relevancia, por lo que pueden considerarse bordillos con acabados decorativos.
  • Carreteras rurales y vías secundarias. Estas vías suelen tener un volumen de tráfico moderado y pueden requerir bordillos que faciliten el drenaje y la contención de la calzada. En Fenollar contamos con una línea de adoquines y bordillos especialmente diseñada para maximizar su capacidad drenante, llamada Depura
  • Áreas industriales y zonas de carga. Debido al tránsito frecuente de vehículos pesados, en este tipo de vías es imprescindible instalar bordillos robustos como los bordillos de calzada que estén fabricados con hormigón de alta resistencia para soportar las cargas elevadas.
  • Parques, zonas ajardinadas, senderos, etc. En estas vías suelen emplearse bordillos de jardín u ornamentales. Es importante también que tengan una buena capacidad drenante. 

Otros factores a tener en cuenta a la hora de elegir el bordillo más adecuado para cada proyecto

Es imprescindible que los bordillos escogidos cumplan con la normativa vigente en cuanto a calidad y seguridad y que superen todos los ensayos y pruebas pertinentes: norma UNE-EN 1340:2004, UNE 127340:2006 y Marcado CE. Estas pruebas están relacionadas con cuestiones físicas y mecánicas como la capacidad para absorber el agua de los bordillos o su resistencia a la flexión, al deslizamiento o al desgaste por abrasión.

Normativa y estándares técnicos

El objetivo de toda esta legislación es garantizar la uniformidad (medidas permitidas, tolerancias y desviaciones), seguridad y calidad de los productos.

Consideraciones estéticas y funcionales

Además de las características técnicas, la estética y funcionalidad del bordillo son aspectos a tener en cuenta:

  • Diseño y acabado. En entornos urbanos, los bordillos con acabados pulidos o texturizados pueden mejorar la apariencia de las calles y contribuir al diseño paisajístico.
  • Color. La incorporación de pigmentos en el hormigón permite obtener bordillos de diferentes colores, facilitando la integración con el entorno y mejorando la señalización visual.
  • Mantenimiento. La elección de materiales y acabados que requieran poco mantenimiento es importante para garantizar la durabilidad y reducir costes asociados a largo plazo.
  • Capacidad drenante. En entornos lluviosos, zonas en las que se produzcan con frecuencia heladas o zonas ajardinadas, la capacidad para drenar el agua de los bordillos es otro factor importante a tener en cuenta.

En Fenollar contamos con una amplia variedad de bordillos peatonales, de calzada, de jardín, etc. que puedes ver en nuestro catálogo Contour. Podemos ofrecer también diferentes acabados, texturas y colores. Y, por supuesto, cumplimos con toda la normativa aplicable en materia de seguridad y calidad.

Si quieres que te ayudemos a escoger el mejor tipo de bordillo para tu proyecto, no dudes en contactar con nosotros. Y recuerda que la elección del bordillo adecuado según el tipo de vía y el volumen de tránsito es esencial para garantizar la seguridad, funcionalidad y estética de las infraestructuras viales.

Cómo mejorar la seguridad vial con pavimentos adecuados en entornos urbanos: el ejemplo de los adoquines de hormigón

Mejorar la seguridad vial escogiendo pavimentos adecuados en entornos urbanos es posible. Reducir accidentes y facilitar la movilidad de los ciudadanos debe ser una prioridad tanto para las administraciones como para las empresas constructoras. En este artículo veremos como una elección inteligente de los materiales de pavimentación puede contribuir a mejorar la seguridad vial en nuestras ciudades.  

La importancia del pavimento en la seguridad vial

El tipo de pavimento utilizado en calles, avenidas y espacios peatonales tiene un impacto directo en la seguridad vial. Un pavimento inadecuado puede generar problemas como deslizamientos, acumulación de agua (charcos o placas de hielo) o desgaste prematuro, lo que incrementa el riesgo de accidentes. En cambio, los pavimentos diseñados con materiales y tecnologías adecuadas pueden reducir estos problemas y mejorar la experiencia de conducción y movilidad.

Para garantizar la seguridad vial, un pavimento debe cumplir con ciertos requisitos técnicos:

  • Resistencia al deslizamiento. Los pavimentos con superficies texturizadas o rugosas reducen el riesgo de resbalones y accidentes, tanto para vehículos como para peatones.
  • Drenaje eficiente. Un buen pavimento debe permitir el drenaje del agua para evitar charcos y acumulaciones que puedan generar hidroplaneo.
  • Durabilidad y resistencia. Los materiales utilizados deben soportar el tráfico constante sin deteriorarse rápidamente.
  • Buena visibilidad y contraste. Los colores y texturas del pavimento pueden mejorar la percepción visual de los conductores y peatones, facilitando la identificación de zonas de cruce y otras señalizaciones.

Adoquines de hormigón, una alternativa fiable para facilitar la seguridad vial en las ciudades

Los adoquines de hormigón prefabricado se han convertido en una solución ideal para mejorar la seguridad vial en entornos urbanos puesto que cumplen con creces los requisitos vistos anteriormente.

Los adoquines de hormigón ofrecen una excelente adherencia, lo que reduce el riesgo de deslizamientos, especialmente en condiciones climáticas adversas. Además, su disposición modular permite una distribución equitativa de las cargas, proporcionando mayor estabilidad a la superficie de rodadura.

Por otro lado, el hormigón es un material permeable que permite el paso del agua por su superficie. Además este material puede ser especialmente formulado para maximizar su capacidad drenante. Es decir, variando los agregados con los que se fabrica y su granulometría se puede lograr que su capacidad para filtrar el agua sea mayor. Es el caso de los adoquines Depura que fabricamos en Fenollar. No hay que olvidar tampoco que el adoquinado es un tipo de pavimento que no sella el suelo, puesto que por las juntas que quedan entre las diferentes piezas el agua llega al subsuelo sin problemas.

Además el hormigón es un material muy resistente capaz de soportar pesadas cargas y con poco desgaste por fricción o rodamiento. También soporta muy bien la meteorología, sea cual sea, desde largas exposiciones solares a lluvias intensas o heladas.

En cuanto a la visibilidad y el contraste, debemos considerar que los adoquines de hormigón prefabricado pueden acabarse con distintos colores y texturas. En Fenollar, por ejemplo, contamos con hasta seis acabados distintos (lisos, abujardados, envejecidos, etc.) para nuestros adoquines y con una amplia gama cromática. Por otro lado, también fabricamos piezas especiales como las del programa Adapta (piezas táctiles, pavimento guía…)  o las que incluyen señalética horizontal para carriles bici, flechas de dirección, etc.

Otras ventajas que presentan los adoquines de hormigón prefabricado con respecto a otros pavimentos y que facilitan, de una u otra manera, la movilidad y potencian la seguridad vial son:

  • Su facilidad de mantenimiento y reparación. Las obras son grandes enemigas de la seguridad vial y la movilidad ciudadana: cambios de dirección, calles cortadas, etc. A diferencia de otro tipo de pavimentos, los adoquines de hormigón pueden reemplazarse de manera individual en caso de daño, evitando grandes obras de reparación y reduciendo los tiempos de interrupción del tráfico.
  • Reducción de velocidades en zonas críticas. Las superficies adoquinadas generan una mayor sensación de textura para los conductores, lo que psicológicamente induce a reducir la velocidad en zonas sensibles como cruces peatonales, calles residenciales y entornos escolares.

Aplicaciones clave de los adoquines de hormigón para mejorar la seguridad vial

Calles peatonales y zonas de baja velocidad. El uso de adoquines de hormigón en calles de prioridad peatonal y zonas 30 km/h ayuda a reforzar la sensación de seguridad y comodidad, promoviendo un equilibrio entre peatones, ciclistas y vehículos.

Intersecciones y pasos de peatones. El contraste visual que ofrecen los adoquines permite delimitar claramente pasos de peatones y zonas de cruce, facilitando su identificación y reduciendo los riesgos de atropello.

Plazas y espacios públicos. Los pavimentos de adoquines no solo mejoran la seguridad, sino que también aportan un valor estético y funcional a plazas y espacios de convivencia urbana.

Carriles para bicicletas. En muchos proyectos urbanos, los adoquines de hormigón se emplean para crear carriles exclusivos para bicicletas, garantizando una separación clara y segura respecto al tráfico vehicular.

En definitiva, los adoquines de hormigón prefabricado son una excelente opción de pavimentación en entornos urbanos puesto que facilitan la difícil tarea de promover y garantizar la seguridad vial y la movilidad de los ciudadanos.

En Fenollar, como especialistas en la fabricación de este tipo de pavimento, podemos ayudarte a planificar y llevar a cabo tus proyectos de pavimentación en entornos urbanos. No dudes en contactarnos si tienes alguna pregunta o necesitas asesoramiento. Te ayudaremos a escoger la mejor opción.